ESCUELA DOMINICAL slR

La Curación de un Cojo

Texto para Memorización:

—No tengo plata ni oro —declaró Pedro—, pero lo que tengo te doy. En el nombre de Jesucristo de Nazaret, ¡levántate y anda! Hechos 3:6 (Nueva Versión Internacional).

Lección: Poder y Amor de Dios.

Sermón:

Buenos días niños… ¿Cómo pasaron la semana? ¿Hablaron con sus amiguitos acerca de Jesús y lo que están aprendiendo acerca de Su poder? Espero que sí porque hay muchos niños que todavía no conocen del poder de Jesús porque sus papás no los llevan a la iglesia. Recuérdate que Dios quiere que tú compartas Su historia con otros niños.
La semana pasada hablamos de cuatro características de la iglesia de los primeros cristianos. ¿Se acuerdan lo que eran?

1. APRENDE
2. AMA
3. ADORA
4. EVANGELIZA

¡Muy bien! ¿Qué hicieron durante esta semana para demostrar estas características?
Esta semana estaremos hablando de la curación de un cojo. Lo que hemos leído hasta ahora en el libro de Hechos demuestra una comunidad ideal de creyentes. Pero, el evento de hoy va a llevar a algunas circunstancias un tanto no agradables. Veamos el comienzo de la historia. Pedro y Juan estamos en camino al templo. Fueron al templo en la tarde que era el tiempo de oración. Ellos llegaron justo al mismo tiempo que un hombre cojo también estaba llegando al templo. Cojo significa que no podía caminar. La Biblia nos dice que el había nacido cojo. También nos dice que él fue llevado al templo probablemente por amigos o parientes para pedir limosnas. Los llevaban al templo porque creían que al dar limosnas tendrían más recompensa o mérito ante Dios.
Este hombre pidió limosna a Pedro y Juan. Los apóstoles pararon y lo miraron directamente. Pedro le dijo, “¡Míranos!” El hombre entonces lo miró, probablemente anticipando que ellos lo fueran a dar dinero. Luego, Pedro le dice, y es nuestro texto para memorizar, “No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy. En el nombre de Jesucristo de Nazaret, ¡levántate y anda!” El no se apartó en este momento a ver al hombre intentar levantarse solo. Él extendió su mano y ayudó al hombre levantarse. El PODER era de Cristo pero la mano era de Pedro.
Los pies y tobillos del hombre se hicieron fuertes. El hombre comenzó a caminar, algo que nunca había hecho anteriormente. Este hombre acompañó a Pedro y a Juan al templo, todo el tiempo caminando, saltando y adorando a Dios. Las personas allí presentes reconocieron al hombre porque lo habían visto a la entrada del templo por varios años. Los testigos de este estaban llenos de admiración y asombro acerca de lo que había ocurrido. Dios trabajó por medio de los apóstoles para curar a este hombre que había sido cojo toda su vida.
El poder de Dios es algo maravilloso. El enfoque este día no estaba en Pedro ni en el cojo, sino en Dios por el milagro que había hecho. La próxima semana escucharemos acerca del discurso de Pedro acerca de lo que sucedió, pero lo que les voy a decir hoy es que él aprovechó el momento para predicar a los que estaban allí acerca de Jesucristo. El mayor milagro que Dios hizo fue enviar a Su Hijo a morir por cada uno de nosotros para que pudiéramos ser salvos de nuestros pecados y ser reconciliados con Dios. ¿Haz aceptado a Jesús como su único y suficiente Salvador? ¿Aprovechas las oportunidades que Dios te da para compartir la historia de Jesús con otros para que ellos también puedan conocer a Cristo? El PODER es de Dios, ¿pero estás dispuesto a Sus manos?
¿Cómo puedes demostrar el amor de Dios a otros durante esta semana? Y al demostrar Su amor, ¿compartirás también la historia de Cristo? Cuando nosotros demostramos amor a los demás es importante también demostrarles que Dios es el que nos ha dado este amor para poder compartirlo.
Dios, ayúdenos a compartir Su amor con otros. Ayúdenos a recordar que eres el autor del amor y el mejor regalo que podemos compartir es la historia de Jesús. Ayúdenos a tener el valor y el amor de compartir esta historia con un amiguito o pariente durante esta semana. En el nombre de Jesús, amén.

Apertura

Material:

Perro de Peluche con las patas envueltas con vendas (o un dibujo de un perrito).

Desarrollo:

Niños tengo un perrito hoy conmigo. Mi perrito no puede caminar. ¿Cómo creen que yo tendría que cuidar del perro? ¿Tendría que darle de comer? ¿Tendría que llevarlo a fuera para hacer del baño? ¿Tendría que bañarlo? ¿Qué podría hacer el perro por si solo? No mucho… Si yo podría regalar a mi perro la capacidad de poder caminar, ¿creen que lo haría? ¡Claro que sí! Yo no lo puedo hacer entonces tengo que seguir cuidándolo.

Explicación:



En nuestra historia hoy estaremos escuchando de un cojo que tampoco podía caminar. Dios le regaló algo muy especial. ¿Quieren escuchar lo que fue? Escuchemos….


Curación de un Cojo
Hechos 3:1-10.

1 Un día subían Pedro y Juan al templo a las tres de la tarde, que es la hora de la oración.2 Junto a la puerta llamada Hermosa había un hombre lisiado de nacimiento, al que todos los días dejaban allí para que pidiera limosna a los que entraban en el templo.3 Cuando éste vio que Pedro y Juan estaban por entrar, les pidió limosna.4 Pedro, con Juan, mirándolo fijamente, le dijo:
—¡Míranos! 5 El hombre fijó en ellos la mirada, esperando recibir algo. 6 —No tengo plata ni oro —declaró Pedro—, pero lo que tengo te doy. En el nombre de Jesucristo de Nazaret, ¡levántate y anda! 7 Y tomándolo por la mano derecha, lo levantó. Al instante los pies y los tobillos del hombre cobraron fuerza.8 De un salto se puso en pie y comenzó a caminar. Luego entró con ellos en el templo con sus propios pies, saltando y alabando a Dios.9 Cuando todo el pueblo lo vio caminar y alabar a Dios,10 lo reconocieron como el mismo hombre que acostumbraba pedir limosna sentado junto a la puerta llamada Hermosa, y se llenaron de admiración y asombro por lo que le había ocurrido.

Manualidad

Materiales:
· Bolsas de Tela colores claros (Muchas tiendas la venden a bajo costo para sustituir las bolsas plásticas—talvez lo donen si lo piden para sus iglesias)
· Marcadores de tela
· Diferentes comidas y/o productos de limpieza
· Ejemplar (incluido)
Preparación:
Cambie la información del ejemplar para incluir el nombre y información de su iglesia y haga copias en hojas de diferentes colores (1 por niño)
Desarrollo:

¡Dios te ama!

Tu Iglesia
Dirección Y Número Telefónico

Los niños van a usar los marcadores para escribir “Dios te Ama” en cada bolsa. En la porción ponga el nombre, dirección y número telefónico de su iglesia.

Luego, deben pintar los ejemplares. Adentro pondrán la invitación y algo de comida y/o productos de limpieza.

Enseñanza:

Los niños deben demostrar el amor de Dios incluyendo una invitación a su iglesia JUNTO con compartir lo necesario del diario vivir.
¡Dios te ama!

Y “Tu Iglesia” también. Te esperamos este domingo a las “9:am” en “esta dirección”.

Número Telefónico




Juego

Material:
Dos patinetas
Dos cuerdas largas
Hojas de papel de construcción color rojo (1 para cada dos niños)

Preparación:

Recorte un corazón del tamaño de la hoja de papel de construcción y escriba “Dios” en medio del corazón.

Patineta, Corazón y ½ Equipo A ------------------------------------ ½ Equipo A
Punto 1 Punto 2
Patineta, Corazón y ½ Equipo B ------------------------------------- ½ Equipo B


Desarrollo:

La línea punteada representa la cuerda larga. El primer niño de cada grupo se sienta en la patineta. Los demás niños toman la cuerda en sus manos para sostenerlo firme. El niño en la patineta tiene que ir de donde se encuentra al niño del otro lado de la cuerda SIN tocar el piso. Solo puede usar la cuerda para mover la patineta hacía el otro lado. Cuando llegue al niño del primer lado hasta el otro lado entrega el corazón al niño y este niño también se sienta sobre la patineta y juntos regresan SIN tocar el piso (tampoco con las manos). El primer grupo que traiga todos de regreso al Punto 1, gana.

Enseñanza:

Debemos demostrar el amor de Dios a los demás.

La Curación de un Cojo
(Hechos 3:1-10)


—No tengo plata ni oro —declaró Pedro—, pero lo que tengo te doy. En el nombre de Jesucristo de Nazaret, ¡levántate y anda! Hechos 3:6 (Nueva Versión Internaciona